martes, 30 de septiembre de 2008

LA GRAN DEPRESION DE 1929.

La economía chilena antes de 1929 sufria de serios problemas, que la hacían totalmente vulnerable a las condiciones externas. Las medidas proteccionistas de Ibáñez aun no lograban cambiar esa situación hacia fines de la década del 20. La dependencia de nuestra economía seguía inalterable, y el alto endeudamiento tampoco había sido solucionado.

En ese escenario, el 29 de octubre de 1929, en el llamado “jueves negro”, se produjo un descalabro en la bolsa de Nueva York. La crisis del mercado accionario se extendió al resto de la economía estadounidense, y luego a Europa, las potencias dejaron de comprar las materias primas. Gran parte de esas materia primas provenían de nuestro país, siendo estas de cobre y salitre.

A comienzos de 1930, las exportaciones entraron en una gran crisis, siendo el comercio exterior chileno el más afectado, según un informe de la liga de naciones. Cayó drásticamente la producción minera, agrícola e industrial.

Mi opinión sobre el tema es que al verse afectada la economía de estados unidos esta repercutió en las grandes potencias del mundo, afectando la economía del país, la cual era inestable ya que dependía del cobre y del salitre.

martes, 9 de septiembre de 2008

VIOLENCIA EN LA ARAUCANIA: RESPONSABILIDAD DE TODOS

Desde el gobierno, con el apoyo de la oposición, se han interpuesto acciones legales y solicitado la aplicación de todo el rigor de la ley en contra de los responsables. Ello contrasta con la pasividad que éste ha tenido frente a otros hechos de violencia ocurridos en la Araucanía, como los allanamientos masivos, apremios ilegítimos.


Hechos constitutivos de tortura, e incluso frente a los casos de homicidio que han afectado a personas mapuches. El incendio que el 17 de este mes afectara el fundo Santa Rosa, en la Araucanía, es un hecho lamentable. Por lo mismo debe ser condenado categóricamente, investigado y sancionado por la justicia, quien quiera sea su responsable. Junto con condenar este hecho, preocupan las implicancias que este tiene para la convivencia interétnica y los derechos humanos en la región.


Aunque personeros de gobierno y de oposición se han abstenido de imputar este hecho a grupos determinados, entidades como el Ministerio Público, encabezadas por el propio Fiscal Nacional, han vuelto a estigmatizar a los mapuches. El fiscal regional de la Araucanía, por su parte, ha ido más lejos, subrayando la intervención en las zonas de conflicto de grupos de apoyo a los mapuches. Menciona al Observatorio de Derechos de los Pueblos Indígenas (hoy Observatorio Ciudadano), entidad que co dirijo, manifestando que ésta participa en la defensa de los mapuches pertenecientes a la CAM. Cuestiona con ello un derecho humano básico hoy internacionalmente reconocido: el derecho a la defensa. Esta lógica podría llevar al Fiscal regional a interpelar la acción de la propia Defensoría Penal Pública, la que ha asumido diversas causas de imputados mapuches vinculados a los conflictos por tierras en los últimos años, imputados que dicho sea de paso, en su mayoría han sido absueltos de los cargos de los que la Fiscalía les ha acusado.


Desde el gobierno, con el apoyo de la oposición, se han interpuesto acciones legales y solicitado la aplicación de todo el rigor de la ley en contra de los responsables. Ello contrasta con la pasividad que éste ha tenido frente a otros hechos de violencia ocurridos en la Araucanía, como los allanamientos masivos, apremios ilegítimos, hechos constitutivos de tortura, e incluso frente a los casos de homicidio que han afectado a personas mapuches. Rara vez se ha escuchado a las autoridades condenar tan enérgicamente como ahora, o visto interponer acciones legales para investigar las responsabilidades criminales detrás de estos hechos.